El fiscal general de Oaxaca, Bernardo Rodríguez Alamilla, confirmó que es un delito retirar el cuerpo de una persona fallecida del lugar donde fue ultimada, por lo que ya se han abierto varias carpetas de investigación.
Detalló que los principales casos se han observado en la región del Istmo de Tehuantepec, principalmente en el municipio de Juchitán de Zaragoza.
Mencionó que, por esta situación, tienen abiertas más de 10 carpetas de investigación; algunas de ellas, aclaró, ya se encuentran judicializadas.
Aunque reconoció que en la región del Istmo este hecho se está volviendo una costumbre, subrayó que ello no significa que se vaya a permitir esta práctica que violenta la ley y altera el debido proceso.
En ese sentido, informó que están trabajando para investigar a quienes cometan estos actos y que se les va a castigar en caso de encontrarse elementos que acrediten la alteración de las investigaciones correspondientes.




