Celebran usuarios nuevas condiciones al transporte público

Redacción Entidad Oaxaca

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lunes, 28 de julio de 2025

El siempre cuestionado servicio de transporte público de la Ciudad de Oaxaca y poblaciones periféricas, se encuentra en crisis. El gobierno estatal ha anunciado ya su plan para extender el Sistema Integrado de Transporte “Binnibus” de las seis rutas que hoy cubre, a 35 rutas integradas, cuestión que no ha caído nada bien en los ánimos del pulpo camionero oaxaqueño. 

Alejandra Gómez Candiani, considerada la “zarina” del transporte público oaxaqueño, pues bajó su control se encuentran las dos empresas con el mayor número de unidades: Transportes Urbanos de la Ciudad de Oaxaca (TUCO) y la Sociedad Cooperativa Choferes del Sur (SCCS), ha asegurado no estar de acuerdo con la intención del gobierno de bajarle la categoría de concesionaria a permisionaria del transporte público, razón por la cual se ha dado la publicación en numerosas unidades de transporte, de cartulinas apoyando su causa, y un anuncio y amenaza constante de bloquear la ciudad de Oaxaca, que aún no se han cristalizado. 

“Me parece muy bien que por fin haya un gobierno que venga a enmendarles la plana los dueños de los camiones. Décadas de estar haciendo lo que quieren, cuando quieren y a la hora que quieren”, comenta a pregunta expresa, Alejandrina Gopar Valenzuela, comerciante y ama de casa que tiene sus 54 años de su vida viajando y transportándose en autobuses de pasajeros de la ciudad de Oaxaca. 

“El servicio siempre ha sido horrible. Tratando a los pasajeros como ganado, jugando carreritas todo el tiempo, con choferes insultándote y gritándote que te bajes por si se te ocurre quejarte. ¿Cuánta gente no han atropellado, con cuyas muertes al final no ha pasado nada?”, se explaya la entrevistada. 

Y no es la única en tener una opinión negativa del tema, Juan Eustaquio Sánchez, de 24 años y estudiante una licenciatura de la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca (UABJO) comparte que hace un tiempo, poco antes de estar a punto de cumplir la mayoría de edad, surgió la posibilidad de manejar un autobús de pasajero de ruta, que finalmente no sucedió. 

“La paga era mínima, por lo que a la tarifa diaria que nos exigían los patrones, había que talonearle más al pasaje. Retacar de pasajeros la unidad, de gritarles que allá atrás hay lugar. Era un desmadre. No aguante más de cuatro días en el trabajo. Como usuario del transporte público pensaba que los choferes eran ojetes porque les gustaba ser así. Pero ya experimentándolo te das cuenta que la actitud de los choferes va ligada directamente a la presión a la que lo someten los dueños de los camiones. Tienen que sacar la cuenta que les marcan, con unidades que ya tienen muchos años de desgaste diario y a la que luego les falla todo”, explica el testigo 

Por su parte, Antonio Cruz García, sociólogo de formación académica y actual trabajador de un restaurante de comida italiana, marca que, aunque el pulpo camionero nunca ha sido un tema popular en Oaxaca, siendo siempre señalado por la impunidad de su mal servicio, se ha conservado así en base a un enorme poder acumulado. 

“Dueñas de las concesiones también han sido diputadas. Los derechos laborales para los choferes siempre han sido prácticamente nulos, dejándoles la única opción de estar de acuerdo con cada cosa que se les ordena, apartándolos y desbaratándoles siempre cualquier mínima opción de organizarse colectivamente”, comenta Antonio, citando el caso de tíos que fueron choferes de ruta que le contaban de los intentos de organizar un sindicato que siempre terminaron en persecución y violencia.   

Al respecto la titular de la Secretaría de Movilidad en Oaxaca (Semovi), Yesenia Nolasco Ramírez señaló que los planes descritos que impulsa el Gobierno del Estado, se realizarán sin afectar los derechos laborales del personal que actualmente trabaja en las empresas transportistas concesionadas, pues no habrá despidos ni pérdida de empleos “El personal de las empresas será parte activa de este proceso. Recibirán capacitación continua para brindar un servicio más eficiente, seguro, incluyente y con enfoque ciudadano”, ha dicho la funcionaria sobre el futuro inmediato. 

Para el sociólogo Antonio, se trata de una estrategia del gobierno estatal para irle restando poco a poco al enorme poder que guardan las cuatro empresas concesionarias del transporte público y que empezó con el reforzamiento que se le hizo al Citybus, ahora rebautizado como Binnibus. 

“Como otros poderes preponderantes de la vida pública oaxaqueña, hay una apuesta por el gobierno estatal por irlos pacificando poco a poco. El gobierno de Oaxaca tampoco está en posibilidades de reemplazar todo el parque vehicular de autobuses que la enorme demanda de transporte público de la ciudad demanda, así que irán de pasito en pasito. Falta ver si los millonarios intereses de los concesionarios se dejan hacer la faena”, concluye el entrevistado.